#02 Urban Farming: Mercado, startups en España y opinión de los VCs
Conoce el sector, 11 startups a seguir en España y la opinión del equipo de Agri-Food Tech de Swanlaab
¿Qué es el Urban Farming? 🏡
Hace referencia a cualquier cultivo de alimentos dentro de las ciudades. Tiene una relación estrecha con la producción y consumo local y puede tomar muchas formas, desde jardines verticales hasta cultivos en azoteas, con una amplia variedad de métodos de cultivo. Te explico explico brevemente todos, uno por uno.
Aunque puede incluir ganadería, sobre todo la acuicultura, a día de hoy se centra principalmente en agricultura. Por ello se suele traducir el Urban Farming habitualmente como Agricultura Urbana.
Según Nature, podríamos ahorrar 1.000 millones de toneladas de CO2 si produjéramos todas nuestras frutas y verduras de forma local, cada año. Es decir, tres veces las emisiones de la economía española, según el INE. Este es, precisamente, el objetivo del Urban Farming.
Aunque con muchos desafíos de rentabilidad y necesidades de capital, se trata de un sector con un potencial inmenso, ya que la demanda de alimentos cultivados localmente y de manera sostenible no deja de crecer.
Disclaimer para puristas: Esta edición contiene un número elevado de anglicismos. Terminos como Indoor Farming son más concisos que agricultura de interiores (y más fancy también, para qué engañarnos…) 😉
¿Qué engloba el Urban Farming? 🧑🌾
Debajo del paraguas del Urban Farming, nos encontramos con Indoor Farming, Rooftop Farming, Community Farming y Food Farming.
Indoor Farming 🥬
Es un tipo de agricultura que se desarrolla dentro de instalaciones cerradas donde la tecnología, no la naturaleza, controla los factores ideales para el crecimiento y la cosecha. Utiliza técnicas como la agricultura vertical, la hidroponía y la aeroponía para maximizar el espacio y la eficiencia de los recursos.
Prácticamente toda la innovación (e inversión) en Urban Farming está dentro del Indoor Farming. Sin embargo, no todo Indoor Farming es necesariamente urbano.
En 2022, según Crunchbase, las startups de Indoor Farming captaron alrededor de 900 millones, el 20% del total en AgTech y la inversión no deja de aumentar:
Existen distintas técnicas y métodos de cultivo, dentro del Indoor Farming:
Vertical Farming
Utiliza estructuras verticales como torres o estantes apilados. Destaca por ser muy eficiente, tanto en recursos, como en el espacio utilizado, por lo que tiene su foco en entornos urbanos, aunque requiere de una inversión inicial elevada.
Suele combinarse con aeroponía, hidroponía o acuaponía, los tres métodos más extendidos para cultivar plantas sin utilizar sustrato.
Aeroponía
Suspende las plantas en el aire y proporciona nutrientes a las raíces a través de la humedad.
Hidroponía
Cultiva plantas sumergiéndolas en agua que está enriquecida con nutrientes.
Acuaponía
Combina la hidroponía y la piscicultura. Las plantas se cultivan en agua enriquecida con nutrientes, que se obtienen de los desechos producidos por los peces en el sistema.
Rooftop Farming 🌇
Tal y como indica su nombre, es una forma de Urban Farming que implica cultivar alimentos en la parte superior de los edificios.
Permite aislar los edificios de las temperaturas extremas, reduciendo su consumo, además de potencialmente abastecer parcialmente de algunos alimentos a sus vecinos.
Presenta algunos desafíos importantes, como la inversión inicial, su mantenimiento, el peso adicional en el techo y la obtención de permisos para su instalación.
Uno de los casos más reconocidos en Europa es el Nature Urbaine de París, con más de 14.000 m2 y que puede producir hasta 1000kg de 35 variedades de fruta y verdura al día.
Un modelo de negocio que podría ser interesante, sería la combinación del Rooftop Farming con la emisión de créditos de carbono por captura de CO2 (aunque no me imagino presentando esto en una junta…). Si te perdiste la Newsletter sobre startups de créditos de carbono, puedes leerla aquí.
Community Farming 🌿
Es un tipo de Urban Farming que utiliza terrenos públicos, habitualmente infrautilizados, para desarrollar proyectos de agricultura, que son trabajados por comunidades locales.
Habitualmente, sus frutos suelen repartirse entre la propia comunidad, asociaciones o negocios locales. Además de lo económico y tangible, tienen un componente educativo, de concienciación y social muy importante.
Solo en Madrid, por poner un ejemplo, existen más de 60 como se puede ver en la web de Huertos de Madrid:
En el caso madrileño, las parcelas son autogestionadas por asociaciones a las que el Ayuntamiento ha cedido las parcelas.
Food Forest 🌳
Un Food Forest, o jardinería forestal, es un sistema de cultivo que imita un ecosistema forestal natural, pero con plantas que producen alimentos comestibles para los humanos. En un Food Forest, se plantan diferentes tipos de plantas en capas verticales, al igual que en un bosque natural. Estas capas pueden incluir árboles de gran tamaño, árboles más pequeños, arbustos, plantas de cobertura del suelo, enredaderas y plantas subterráneas.
La idea es que todas estas plantas trabajen juntas para mantener la salud del ecosistema, al igual que en un bosque natural, por lo que tiene muy poco mantenimiento.
Aunque pueda parecer que esto se desvía del Urban Farming, Standford presentó un estudio hace unas semanas a la ciudad de San Antonio (California) que si toda la tierra pública infrautilizada en la ciudad se convirtiera en Food Forests, podrían proporcionar +87 millones de kgs de alimentos al año, valorados en $995 millones y suficientes para alimentar a casi 314,000 hogares durante un año.
En la línea con el último punto sobre Community Farms, el mismo estudio de Standford indicaba que si la tierra pública infrautilizada de San Antonio se convirtiera en huertos urbanos, se podrían proporcionar 420 millones de kgs de alimentos valorados en $1.17 mil millones, suficientes para alimentar a 1.27 millones de hogares.
Sin embargo, las Community Farms, al contrario que los Food Forests, requieren de mucho mantenimiento y limitan el acceso a los habitantes, mientras que un Food Forest es en sí un espacio verde y que no requiere apenas mantenimiento.
Cifras globales 🌍
Según DRI, se prevé que el mercado mundial de la agricultura urbana alcance los 203 mil millones de dólares en 2027. Esto representa un crecimiento anual del 7,82%, respecto a los 130 mil millones de 2021.
Aunque el mercado tiene un potencial imparable debido al crecimiento de las grandes ciudades y la concienciación por alimentos más sostenibles, se trata de una industria con grandes retos de rentabilidad y de unas necesidades de capital inmensas.
En un contexto de inversión global donde cada vez juega un mayor papel la sostenibilidad del modelo de negocio, algunas scale ups han sufrido mucho en los últimos meses en Europa debido a los precios de la energía.
Hay scale ups como Agricool o Glowfarms que anunciaron sus cierres el año pasado, aunque quizá el más llamativo sea el caso de Infarm, la principal scale up europea de agricultural vertical. A pesar de haber levantado más de €600M, hace apenas unas semanas anunciaba el cierre de sus operaciones en Europa debido, también, al aumento de los precios de la energía.
Opinión del Venture Capital 💸
Más allá de los datos, he pedido su tesis sobre el mercado a Xana Belastegui, Partner y CIO del equipo de Agri-Food Tech de Swanlaab que, además del último fondo objetivo de €80M para B2B Software, se preparan para lanzar un fondo en esta vertical.
Dentro del urban farming, nos interesa particularmente el indoor farming por el enfoque más tecnológico, global y con modelo B2B que presenta, que se alinea muy bien con nuestra estrategia de inversión.
A pesar de que se invierte en el sector del indoor farming desde hace unos 20 años, en particular en el vertical farming, aún se enfrenta a retos significativos. Estos desafíos están relacionados principalmente con la inversión requerida para iniciar proyectos, la rentabilidad y cómo diferenciar los productos de los obtenidos en la producción tradicional.
Estamos en una fase de ajuste de las expectativas de capacidad y retorno económico, algo que ya ha ocurrido en otros sectores tecnológicos. Hemos pasado por años de promesas, probablemente demasiado exageradas, en cuanto a beneficios en sostenibilidad, capacidad productiva y generación de valor, acompañados de valoraciones demasiado elevadas y/o con modelos de negocio demasiado agresivos en crecimiento, como es el caso de InFarm (Europa) o AppHarvest (US). En este momento, se está iniciando una etapa de cambio en el sector, hacia una mayor transparencia en cuanto a la oportunidad y los retos de la tecnología y una mejor gestión de las expectativas.
Los retos principales que observamos, que en muchos casos han sido la causa del fracaso de proyectos empresariales muy ambiciosos con foco en la producción para venta a retail pero que siguen siendo oportunidades de negocio, están relacionados principalmente con los costes de implantación y operación, la gestión de la automatización de procesos y el posicionamiento del producto en mercado. Retos, que hacen de este sector, una oportunidad con impacto tanto desde el punto de vista de la sostenibilidad, como desde el punto de vista económico.
Los costes de implantación de este tipo de sistemas de cultivo son muy altos por la intensidad tecnológica necesaria para su funcionamiento y es clave gestionar adecuadamente tanto la financiación de este coste, como la escala productiva. Ir de 0 a 100 en volumen de producción no ha resultado ser la mejor estrategia para varias de las empresas pioneras. Por otro lado, los costes operativos, aunque el sistema disminuya en gran medida los costes de agua e insumos, siguen siendo elevados, ya que un % muy altos corresponde a la fuente de energía que hasta ahora está siendo principalmente la electricidad. Cualquier solución que permita una disminución en la necesidad energética, una mejor gestión o el uso de fuentes renovables, impactará de forma positiva y directa en la cuenta de resultados. Además, permitirá que esta tecnología pueda ser realmente sostenible desde el punto de vista medioambiental y disminuir su impacto en la huella de carbono, como desde el punto de vista económico.
Otra de las hipotéticas ventajas asociadas al indoor farming es la posibilidad de automatización de procesos, reduciendo el coste en recursos humanos, cuya oferta es escasa. La automatización se ha alcanzado parcialmente, pero a costa de una gran inversión en el desarrollo de sistemas de control y análisis de datos, muchas veces realizado de forma individual por cada empresa, en vez de incorporando tecnología de terceros a un coste menor. En esta área probablemente veremos importantes mejoras en los próximos años teniendo en cuenta el desarrollo de la IA, la robótica y el análisis de datos.
El posicionamiento en mercado del producto obtenido es otro de los grandes painpoints del sector porque en general los productos más sencillos de producir, como lechugas y otros cultivos de hoja verde, son también los que tienen precios más competitivos en el sector agrícola tradicional y es difícil convencer al consumidor para que pague un precio más alto por el valor del sistema de cultivo y sus ventajas medioambientales (km0, menor uso de agua y pesticidas, etc). Aquí esperamos ver dos tendencias principales en el corto/medio plazo: por un lado, avances científicos que permitan cultivar productos de mayor valor añadido como frutos rojos, hortícolas, cultivos para uso farmacéutico, para fragancias, para el sector cosmético, etc, y por otro lado, entrada de los sistemas de indoor farming en mercados con mayor necesidad de cultivo cerrado, controlado y km0, como grandes capitales y países del Middle East, grandes importadores de producto hortícola y frutícola, que además disponen de la capacidad económica para la inversión en los sistemas y para la compra de productos de mayor precio.
El indoor farming tiene la capacidad de convertirse en una solución relevante dentro de las opciones de producción agrícola bajo ciertas premisas, que convivirá, pero no sustituirá en ningún caso a la agricultura tradicional en abierto o invernadero. Tanto en el desarrollo y comercialización de soluciones tecnológicas que alivien los puntos críticos para la sostenibilidad económica y medioambiental mencionados, como en modelos de negocio productivos más alineados con las necesidades locales/regionales, existen oportunidades de generación de valor que algunas startups ya están persiguiendo activamente.
Startups en España 🇪🇸
Early Stage 🐤
Ekonoke: Especializa en el cultivo hidropónico de lúpulo en un entorno 100% controlado, en la vertical del Indoor Farming. Han desarrollado su propia tecnología para optimizar el cultivo de lúpulo, sin el uso de pesticidas, herbicidas o fungicidas, utilizando solo energía renovable, con una huella hídrica 20 veces menor y actuando como sumidero de carbono. Fundada en Madrid en 2016, con unos 10 empleados, ha levantando más de €4M.
Groots: Se dedica al Vertical Farming en zonas urbanas. Utiliza la tecnología de la hidroponía en un ambiente controlado para cultivar una variedad de plantas de manera eficiente y sostenible. Su producción incluye lechugas, frutos rojos, tomates y plantas de alto valor para industrias no alimentarias. Fundada en Barcelona en 2019, con unos 20 empleados, ha levantado menos de €1M, aunque recientemente anunciaron estar cerca de cerrar una ronda de €3M.
Enkitek: Proporciona tecnología para automatizar y monitorear cultivos de Indoor Farming. Enkitek se involucra en todo el proceso, desde la ideación hasta la implementación, adaptando su solución a diferentes diseños. Fundada en Barcelona en 2020, con unos 4 empleados.
Farmbrots: Producen microbrotes y setas a través del Vertical Farming. Buscan proporcionar alimentos nutritivos y sostenibles, cultivados localmente, reduciendo la huella de carbono y promoviendo la salud y el bienestar. Fundada en Barcelona en 2020, con unos 3 empleados.
Neboda: A través de la hidroponía y el Vertical Farming, cultivan vegetales de hoja y hierbas aromáticas. Actualmente comercializa sus productos a restaurantes de alta gama, pero tiene planes de expandirse a supermercados en un futuro cercano. Fundada en 2019 en Vigo, con unos 4 empleados.
Niwa: Desarrolla hardware y software para Indoor Farming. Ofrece un controlador todo en uno que permite a los usuarios monitorear y controlar su jardín interior. Los usuarios pueden planes de crecimiento, monitorear datos y hacer ajustes ambientales. Fundada en 2014, con unos 5 empleados y una ronda Seed en 2017.
Instagreen: Se dedica al Vertical Farming, cultivando microgreens y otros vegetales en un entorno controlado en la ciudad. Además de su producción principal, ofrece sistemas de cultivo y formación para agricultores profesionales y aficionados. Fundada en Barcelona en 2014, con unos 3 empleados.
Seed Stage 🐣
Aloalto: Utiliza el Vertical Farming para producir productos en zonas urbanas en su torres de diseño propio, como primer prototipo. Su visión es lanzar su Model 0 farm, con mucho peso en la automatización con AI y robótica. Fundada en Barcelona en 2022, con unos 3 empleados y una ronda pre-seed con BAs.
TerraceLab: Ofrece un servicio de Agriculture as a Service, mediante la instalación de sistemas de agricultura vertical en espacios de trabajo. Incluyen la instalación, mantenimiento, cosecha y distribución de los alimentos. Fundada en Madrid en 2022, con unos 8 empleados.
Isifarmer: Desarrolla una especie de Urban Farming as a Service, permitiendo a agricultores urbanos producir alimentos en sus propios centros. Su visión es crear una red mundial de urban farmers. Fundada en 2022 en Madrid, con unos 4 empleados.
Cantabrica: Cultivan brotes de plantas aromáticas y hortalizas utilizando la hidroponía y Vertical Farming. Además de vender sus productos a restaurantes y tiendas de alimentación, ofrecen kits de cultivo para que los particulares puedan cultivar sus propias plantas en casa. Fundada en 2021 en Oviedo, con 2 empleados.
Muy valiosa la información, está muy interesante este mercado.